Un magnate egipcio de la comunicación crea un canal contra la radicalización islámica

El millonario egipcio y magnate de las telecomunicaciones planea lanzar nuevos canales de televisión que contrarresten lo que él decribe como creciente conservadurismo social y religioso. Sawiris, de religión cristiana copta, tiene una de las mayores fortunas del planeta. Nada menos que la que ocupa el puesto 62 en el 'ranking' de la revista Forbes (ha subido este año desde el puesto 278).

El magnate ha declarado que lanzará un canal de películas sin censura a principios de 2008 y a continuación una emisora del tipo 'todo noticias'. Sawiris ya posee OTV, un canal egipcio de entretenimiento 24 horas.

En una cena junto a periodistas, el millonario ha manifestado sentirse molesto debido al aumento del número de mujeres que llevan los diferentes pañuelos islámicos.

"No estoy en contra del velo porque entonces estaría contra las libertades individuales", ha aclarado Sawiris, "pero cuando camino por la calle ahora me siento como si estuviera en Irán...Me siento como un extraño". El magnate alerta así del hecho de que las mujeres en la República Islámica de Irán están obligadas por ley a cubrir sus cabellos y vestir ropas largas y holgadas para disimular sus figuras.

Frente a esas posturas conservadoras, Sawiris pretende una visión más libre: "si una película está más allá de los límites de las costumbres y las tradiciones, en ningún caso será emitida", ha dicho. "Pero si ponemos una película, no la censuraremos".

Muchas televisiones en Egipto y otros países del mundo árabe cortan escenas sexuales y restingen el lenguaje ofensivo, por lo que los comentarios de Saiwiris incomodarán a gran parte de los grupos políticos. Uno de ellos, los Hermanos Musulmanes, fue el blanco de los ataques de Sawiris en el periódico Al Masry Al Youm, del que controla una parte.

El magnate espetó al respecto: "Al infierno con ellos". "Ni un cristiano está esperando para su permiso. Dios es justo y no discrimina entre las personas.".

Contra la censura estatal
Sawiris, que dice oponerse a islamistas y cristianos del mismo modo, ha expresado su interés en contrarrestar la "alta dosis" de programación religiosa en los otros canales. Su estrategia se apoyará en shows dirigidos al público joven, a la vez que películas árabes sin censura y filmes extranjeros.

El colchón económico sobre el que se apoya Naguib Sawiris es el cuarto operador de telefonía de los países árabes y se llama Orascom, de la que el millonario es presidente.

Se trata de una nueva oportunidad para que los medios independientes desafíen el dominio estatal de la prensa y televisión de Egipto, en donde se ha dictado durante décadas que se puede leer, ver o escuchar. En el país islámico, algunos periódicos han rebasado los límites con sus críticas al presidente Mubarak, pero hasta el momento la televisión no ha gozado de esas mismas libertades.