‘La Fábrica Interactiva’ es una compañía que se dedica a gestionar, mantener y desarrollar contenidos para diferentes empresas editoras. Entre las ventajas de este nuevo servicio se encuentran la disminución de costes, la actualización constante de los contenidos y especialistas en diversas materias.
La subcontratación de servicios, outsourcing, es una práctica habitual entre las empresas, que consiste en ceder la gestión de ciertas áreas del negocio a personas o sociedades ajenas. Desde hace años, compañías de diferentes sectores vienen practicando el outsourcing como herramienta de utilidad para agilizar sus procesos, abarcar funciones en las que no están especializadas, rentabilizar sus recursos financieros y capitalizar los componentes humanos. A las subcontrataciones más extendidas por su madurez en el mercado, como las empresas de asesoramiento contable y jurídico, consultoría, publicidad, servicios tecnológicos (informática, hosting, desarrollos, implantación de sistemas, etc), call-center, logística…se pueden añadir nuevas funcionalidades que comienzan a ser muy demandadas.
Por ejemplo, las áreas de recursos humanos, fuerzas de ventas, dossiers de prensa, gestión de conferencias, formación para empresas, organización de eventos, relaciones públicas o gestión de contenidos. Multitud de empresas de estas áreas se están abriendo paso poco a poco, y sin duda en pocos años vivirán procesos de maduración similares a sus antecesores especializados en otros servicios.
En ciertos tipos de subcontrataciones, como consultorías de marketing, de gestión estratégica, gestión de procesos de negocio, etc., se establecen fuertes relaciones entre la empresa demandante y la que ofrece el servicio. En estas ocasiones el asesoramiento implica conocer a fondo la cultura, los sistemas de trabajo, los objetivos, estrategias, y demás informaciones acerca de la empresa cliente, y requiere que el proveedor de los servicios de outsourcing trabaje mano a mano, casi como un socio, más que como un mero proveedor. Lógicamente la confidencialidad es absolutamente estricta y la colaboración mutua es y debe ser plena.
En el mundo de los negocios nos movemos en un entorno en el que la especialización es cada vez más profunda. Esto conlleva múltiples ventajas y algunos inconvenientes, como la necesidad de cubrir áreas en las que la empresa no genera recursos, ni tiene capacidad funcional para cubrir los ‘agujeros’ provocados por la necesidad de una alta especialización. Aparecen pues nuevas exigencias, y se hace necesaria la oferta renovada de servicios inexistentes hasta el momento. Podemos tomar como ejemplo el outsourcing de contenidos, que consiste en la subcontratación de la creación, mantenimiento y desarrollo de contenidos para los medios de comunicación. Una oferta de colaboración que le permite al medio disponer de un departamento de redacción al completo, con periodistas, fotógrafos o ilustradores especializados en las diversas materias, contando con una gran ventaja: del mantenimiento de estos profesionales dentro de la plantilla se encarga la empresa de outsourcing.
La experiencia de ‘La Fábrica Interactiva’ como proveedor de contenidos demuestra que la opción de subcontratación no solamente es requerida por empresas dedicadas a la edición, ya que numerosas empresas especializadas en la distribución, y en muchos casos creación de contenidos, tienen también en ocasiones la necesidad de generar nuevas ideas o artículos de temas muy especializados, que sus equipos en ese momento no pueden generar. Este factor facilita enormemente la contratación de profesionales expertos en periodismo, redactores y correctores de estilo, fotógrafos, ilustradores, informáticos…. Cada empresa de outsourcing suele contar con un amplio abanico de profesionales muy especializados (comerciales, ingenieros informáticos…), para cubrir con calidad las demandas de sus clientes. Lo que posiciona a este tipo de empresas en grandes generadoras de empleo.
‘En La Fábrica Interactiva, la prioridad es el cliente, por eso cuentan con un equipo de redactores, periodistas, correctores de estilo, traductores y creativos capaces de crear el mejor contenido personalizado para cada empresa, adaptándolo completamente a las necesidades del medio’, señalan sus responsables.
Entre sus Clientes se encuentran la Revista Hola, Ahló, Hello, Grupo Hachette, Grupo Recoletos, Grupo Zeta o Globus Ediciones, entre otros. Para más información se puede consultar la web
www.lafabricainteractiva.com, o se puede visitar esta referencia en el portal propiedad de La Vanguardia Ediciones, del Grupo Godó: Servijob.com