La guerra continúa en la Franja de Gaza con intensos bombardeos aéreos y ataques terrestres israelíes que causan numerosos muertos y heridos entre la población civil, especialmente entre mujeres y niños, reportaron este lunes los trabajadores humanitarios de la ONU que se encuentran en ese territorio palestino y que continúan pidiendo que se permita al personal sanitario seguir haciendo su labor de salvar vidas.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) informó que los médicos del único hospital en funcionamiento en la gobernación de Deir al Balah, “fueron obligados a cesar las actividades de salvamento y otras actividades críticas... e irse” después de que se emitiera una orden de evacuación en medio de “un aumento de la violencia por parte del ejército israelí.
De acuerdo con los datos de la OMS, sólo quedan cinco médicos en el Hospital Al-Aqsa, en la zona media de Gaza, donde un equipo de la ONU entregó suministros médicos para ayudar a 4500 pacientes en diálisis durante tres meses y a 500 pacientes que requerían atención traumatológica.
Desde Al-Aqsa, el oficial de Emergencias Sanitarias de la OMS, Sean Casey, publicó un video en la plataforma de redes sociales X el domingo por la noche que muestra escenas caóticas mientras los médicos atienden a pacientes en el piso manchado de sangre, algunos de los “cientos” llegaban para recibir tratamiento urgente.
“En algunos casos, tratan diariamente a cientos de víctimas en un pequeño departamento de emergencias”, explicó Casey. “Están atendiendo a los niños en el suelo”.
El director general de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus, destacó las “necesidades inmensas” en el hospital, que incluyen “trabajadores de la salud, suministros médicos y camas”.
En una publicación en X, Tedros señaló que para el personal de salud, la mayor necesidad “es que su hospital, y sus trabajadores, pacientes y familias, estén protegidos de ataques y hostilidades”.
Detalló que más de 600 pacientes y la mayoría de los trabajadores de la salud debieron abandonar las instalaciones, y afirmó que es “inconcebible” que la gente no pueda contar con atención médica. Ningún hospital está en pleno funcionamiento en el norte de Gaza.
La OMS tuvo que cancelar el domingo una misión al norte de la Franja, “debido a los peligros y a la falta de permisos necesarios”, señaló Tedros y añadió que, en otras partes de Gaza, sólo un puñado de instalaciones de salud funcionan.
En los últimos días, el número de víctimas ha aumentado notablemente”, con “más de 120 casos de traumatismos y decenas de muertos cada día debido al aumento de los bombardeos, las heridas de bala, las lesiones por aplastamiento de edificios derrumbados y otros traumatismos relacionados con la guerra”, dijo el titular de la agencia sanitaria.
Un equipo médico de emergencia intenta desplegarse para apoyar a los trabajadores sanitarios en Al-Aqsa, sin embargo, “esto sólo será posible en un entorno seguro", subrayó Tedros.
Por su parte, la Oficina para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA), confirmó los “intensos ataques israelíes en la gobernación de Deir Al Balah, en el centro de Gaza, y las ciudades sureñas de Khan Younis y Rafah”.
OCHA precisó que el domingo por la tarde las fuerzas israelíes “atacaron objetivos en la ciudad de Gaza, como los campamentos de refugiados de Jabaliya , Tal Az Za'atar y Beit Lahiya”, causando “un gran número de muertes” en la zona de Al Fallouja del campamento de Jabaliya.
La Oficina también indicó que se registraron disparos de cohetes hacia Israel por parte de grupos armados palestinos, en medio de “operaciones terrestres y combates... en gran parte de la Franja de Gaza, lo que provocó más muertes”.
Los últimos datos del Ministerio de Salud de Gaza citados documentan al menos 22.835 muertes en los 93 días transcurridos desde que comenzaron los bombardeos israelíes, en respuesta al ataque de Hamas al sur de Israel el 7 de octubre, que dejó unos 1200 muertos, entre ellos al menos 33 niños, y más de 240 rehenes.
Entre el viernes y el domingo habrían muerto 225 palestinos y casi 300 fueron heridos.
En cuanto a las bajas israelíes, 174 soldados han muerto en Gaza y más de mil resultado heridos desde que comenzaron las operaciones terrestres, según el ejército israelí.
El Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) cifró en 3200 los nuevos casos diarios de diarrea entre niños menores de cinco años. Antes de la escalada de hostilidades, el promedio era de 2000 por mes.
Además, existe una grave preocupación ya que el 90% de los niños menores de dos años vive en “pobreza alimentaria grave” y “sólo obtiene cereales o leche” para comer esporádicamente.
“El tiempo se acaba. Muchos niños ya se enfrentan a una desnutrición aguda grave en Gaza”, afirmó la directora ejecutiva de UNICEF, Catherine Russell. “A medida que se intensifica la amenaza de hambruna, cientos de miles de niños pronto podrían sufrir desnutrición grave y algunos de ellos correrían riesgo de morir. No podemos permitir que eso suceda”, enfatizó.
La información actualizada de la ONU especifica que entre los días 6 y 7 de enero, entraron a Gaza 218 camiones con alimentos, medicinas y otros suministros a través de los cruces de Rafah y Kerem Shalom. Antes de que estallara el conflicto, más de 500 camiones llevaban ayuda a la Franja cada día, el 60% accedían por Kerem Shalom.