Los Centros Tecnológicos de Castilla y León, integrados en la Red NODDO, están liderando proyectos innovadores para la reducción de residuos y la promoción de una economía circular. Iniciativas como el proyecto United Circles, que busca sinergias entre comunidades urbanas e industrias, y BIOVALOR, que fomenta la bioeconomía en tierras marginales, destacan por su enfoque sostenible. Otros proyectos incluyen la Red MARFIL para el desarrollo de bioplásticos a partir de fuentes renovables y CÍCLICOM, que se centra en el reciclaje de plásticos complejos. Estos esfuerzos posicionan a Castilla y León como un referente en sostenibilidad y tecnología, inspirando a empresas y ciudadanos hacia un futuro más ecológico.
Los Centros Tecnológicos de Castilla y León, agrupados en la Red NODDO, están a la vanguardia de iniciativas sostenibles que buscan reducir residuos y promover una economía circular. Instituciones como CARTIF, Cesefor, CIDAUT, ICAMCyL e Itagra están desarrollando proyectos innovadores en bioplásticos, reciclaje de neumáticos y bioeconomía.
Estas entidades, junto con socios estratégicos, se han consolidado como referentes en la lucha contra los residuos y la promoción de prácticas sostenibles. Desde el desarrollo de bioplásticos hasta el reciclaje avanzado de materiales, estos centros colaboran con empresas y organizaciones de investigación tanto nacionales como internacionales.
Uno de los proyectos más destacados es United Circles, liderado por CARTIF. Esta iniciativa demuestra cómo las sinergias entre comunidades urbanas e industrias pueden contribuir significativamente a la reducción de residuos. En Salamanca, uno de sus tres demostradores europeos, se trabaja en el reciclaje de aguas residuales para recuperar nutrientes y energía, optimizando así el uso de recursos y reduciendo las emisiones de CO2.
Financiado por Horizonte Europa, United Circles integra soluciones innovadoras en España, Italia y Turquía, promoviendo ciudades más sostenibles y una industria descarbonizada.
El centro Cesefor lidera el proyecto BIOVALOR, que promueve la bioeconomía a través de la gestión forestal sostenible y el cultivo de especies aromáticas en tierras marginales. Estos cultivos no solo permiten obtener aceites esenciales y subproductos valiosos, sino que también contribuyen a la recuperación de ecosistemas agroforestales y generan empleo en áreas rurales despobladas.
Con tecnologías como la digitalización de cultivos y la recolección mecanizada, BIOVALOR avanza hacia la modernización del sector agroforestal y su adaptación al cambio climático.
CIDAUT colabora con AIMPLAS, GAIKER y AITIIP en la Red MARFIL, un proyecto destinado al desarrollo de bioplásticos innovadores a partir de fuentes renovables como subproductos agroindustriales. Estos materiales están diseñados para ser más reciclables y biodegradables, orientándose hacia aplicaciones clave en sectores como el transporte y la agricultura.
La iniciativa tiene como objetivo que más del 5% de los plásticos utilizados en España provengan de fuentes renovables para 2030. Además, busca transformar residuos agroindustriales en recursos valiosos mediante nuevas técnicas de polimerización que mejoran las propiedades de los bioplásticos.
CIDAUT también encabeza el proyecto CÍCLICOM, un Ecosistema de Innovación que se centra en implementar soluciones técnicas avanzadas para reciclar materiales compuestos y plásticos complejos. Este proyecto se basa en el exitoso programa OSIRIS e involucra a centros tecnológicos como GAIKER, AIMPLAS y AITEX.
CÍCLICOM conecta actores clave del tejido productivo nacional ofreciendo una plataforma tecnológica para empresas e investigadores. Su objetivo es fomentar prácticas de economía circular en sectores estratégicos como construcción, automoción y electrónica.
ICAMCyL participa destacadamente en el proyecto BlackCycle, liderado por Michelin. Esta iniciativa transforma neumáticos fuera de uso en nuevos productos mediante procesos avanzados como la pirólisis. Con un presupuesto total que asciende a 16 millones de euros, BlackCycle ha logrado reducir emisiones CO2 mientras aumenta el uso sostenible de materiales.
A su vez, Itagra está involucrada en el proyecto Purinalis, centrado en evaluar modelos económicos circulares para gestionar purines porcinos. Este proyecto busca modernizar la ganadería promoviendo prácticas más eficientes adaptadas al futuro.
A través de estas iniciativas, los Centros Tecnológicos de la Red NODDO demuestran que la innovación y colaboración son fundamentales para enfrentar los retos actuales relacionados con la sostenibilidad. Sus esfuerzos apuntan hacia un modelo productivo más circular que respete el medio ambiente y refuerce el compromiso regional con una economía verde.
Estos proyectos no solo inspiran a empresas e instituciones públicas sino también a ciudadanos comunes, mostrando que un futuro sostenible es posible si se trabaja conjuntamente.
Los Centros Tecnológicos de Castilla y León, integrados en la Red NODDO, son instituciones que impulsan iniciativas de innovación y sostenibilidad en diversas áreas, incluyendo bioplásticos, reciclaje de neumáticos y bioeconomía.
Algunos proyectos destacados incluyen United Circles, que busca minimizar residuos a través de sinergias industriales; BIOVALOR, que fomenta la bioeconomía en tierras marginales; y Red MARFIL, que desarrolla bioplásticos a partir de fuentes renovables.
Los centros promueven la economía circular mediante el desarrollo de tecnologías y soluciones innovadoras que transforman residuos en recursos valiosos, fomentando prácticas sostenibles en diferentes sectores industriales.
Estos proyectos tienen un impacto positivo al reducir la generación de residuos, disminuir las emisiones de CO2 y promover el uso eficiente de recursos naturales, contribuyendo así a un entorno más sostenible.
Las colaboraciones con empresas e instituciones permiten a los centros tecnológicos integrar conocimientos y recursos, potenciando la innovación y aumentando la efectividad de sus iniciativas para abordar los desafíos ambientales.