Los países han concluido un acuerdo histórico sobre pandemias que establece un marco para mejorar la colaboración internacional, la equidad y la resiliencia ante futuras amenazas sanitarias globales. Este borrador será presentado a la Asamblea Mundial de la Salud, donde deberá ser ratificado por cada nación. Es importante destacar que Estados Unidos no participó en las negociaciones finales y no forma parte del acuerdo.
Los países han alcanzado un acuerdo histórico que establece un marco destinado a fortalecer la colaboración internacional en el ámbito de la salud. Este pacto busca mejorar la equidad y la resiliencia ante futuras amenazas sanitarias globales.
El borrador del acuerdo será presentado ante la Asamblea Mundial de la Salud, donde se decidirá su adopción. En caso de ser aprobado, cada país deberá ratificarlo individualmente para que entre en vigor.
A pesar de la importancia del acuerdo, Estados Unidos no participó en la ronda final de negociaciones y, por lo tanto, no formará parte del instrumento propuesto. La ausencia del país podría influir en los esfuerzos globales para enfrentar crisis sanitarias futuras.
Este desarrollo marca un paso significativo hacia una mayor cooperación internacional en salud pública, con el objetivo de estar mejor preparados ante emergencias sanitarias que puedan surgir en el futuro.
Se ha esbozado un marco para reforzar la colaboración internacional, la equidad y la resiliencia frente a futuras amenazas sanitarias mundiales.
El borrador se someterá a la Asamblea Mundial de la Salud.
En caso de ser adoptado, deberá ser ratificado por cada país.
No, Estados Unidos no participó en la ronda final de negociaciones y no forma parte del instrumento.